Uno de mis mayores temores es que, en un descuido, uno de mis hijos pueda caer en una piscina y ahogarse…
Las clases de natación
Aprender a nadar es una verdadera necesidad para los niños, es un seguro de vida que nos tranquiliza ante uno de los disfrutes más maravillosos del verano para los niños: jugar con el agua y dentro de ella. Una de las principales recomendaciones de los expertos señala que la mejor opción es que los niños se familiaricen con el agua desde muy pequeños siempre supervisados por sus padres. Cuando a los niños les gusta estar en el agua y disfrutan de jugar en ella, el aprendizaje nos llevará menos tiempo Ya hay muchos papás que confiamos esta tarea en los profesionales de escuelas de natación aunque una buena opción son las clases a domicilio ya que aprenden en su propia piscina lo que les da más confianza.
Mientras dure el aprendizaje no debemos jamás perderlos de vista.
Rejas de Seguridad
Los especialistas recomiendan que estas deben ser del tipo peineta y de a lo menos 1.20 metros de altura (así evitamos que los niños las escalen) y la separación entre barrotes no debe superar los 12 cm para que no quepa la cabeza del niño. En cuanto a la puerta, clave para que no se traspase el cerco, es que debe contar con una chapa en la parte superior, la que al mismo tiempo no esté al alcance de los pequeños.
Se recomienda no retirarlas cuando los niños de la casa ya han crecido, porque los hijos de familiares o amigos también pueden caerse al agua y sufrir un accidente
Alarmas
Aunque se dice que no son muy confiables por los “falsos positivos”, suenan incluso cuando cae un insecto, son un buen complemento a las medidas de seguridad.
LAS ALITAS NO SON SALVAVIDAS; sirven exclusivamente para que el niño adquiera confianza en el agua. El único flotador adecuado es un chaleco bien abrochado con apoya cabeza y con un sistema que voltea a la persona hacia arriba en el caso que caiga al agua. Todos los papás estarán de acuerdo conmigo en que estas medidas nos darán un respiro y una menor preocupación, aunque nunca les quitemos los ojos de encima.
- Servicio de Urgencia de CLC 800 211 800
- Rescate Alemana: + 56 2 2910 9911
Fuente:
Dr. Héctor Araníbar, pediatra de Clínica Alemana.
Dr. Carlos Hinzpeter G. Departamento de Pediatría Clínica Las Condes